Cuando el caos me invade
Cuando estás gilipollas te da por reflexionar y vuelves a repasar tus principios, no quiero olvidarme de ellos y los invoco:
4. Siempre intentaré comprender cualquier objeción a mis planteamientos, puesto que puede ser erróneo. Lo contrario a lo que piense no siempre es incompatible, sino que puede llegar a ser complementario, y algo que mejore, me haga más correcto y razonable.
5. Siempre buscaré darle a mis actuaciones, la forma más correcta, para reducir al mínimo situaciones comprometidas, no deseadas.
11. En cada instante pensaré sobre cada una de mis actuaciones, en esa búsqueda incesante de aquello en que me sienta insatisfecho y quiera estar satisfecho. Haré uso del mecanismo reflexivo.
12. Siempre sentiré y buscaré reparar el daño ocasionado por alguna de mis actuaciones, tendré remordimientos.
14. Siempre buscaré a los problemas la cara más positiva o la menos negativa, como punto de partida, haciendo uso de la racionalidad en cada instante.
-- Sacado de ’ Capitulo XVI “La guía de la vida” ’ --
0 comentarios